¿A qué edad es más común la disfunción eréctil?
Un síntoma frecuente a partir de los 50
La disfunción eréctil (DE) es una condición médica que afecta a millones de hombres en todo el mundo, y aunque puede aparecer en distintas etapas de la vida, su frecuencia aumenta notablemente con la edad. Muchos hombres se sorprenden al experimentar cambios en su respuesta sexual al llegar a los 50, pero lo cierto es que esta década marca un punto clave en la salud sexual masculina.
¿Desde qué edad puede aparecer la disfunción eréctil?
La DE no es exclusiva de los adultos mayores. Algunos hombres pueden empezar a notarla en sus 30s o 40s, especialmente si existen factores de riesgo como diabetes, hipertensión, obesidad, tabaquismo o estrés crónico. Sin embargo, en esos casos suele ser esporádica y reversible.
¿Por qué es más común en los 50?
A partir de los 50 años, el cuerpo comienza a mostrar señales más visibles del envejecimiento. En el caso de la función eréctil, hay varios factores fisiológicos y hormonales que influyen:
• Disminución de los niveles de testosterona: esta hormona juega un papel importante en el deseo sexual y la función eréctil. Su producción disminuye de forma natural con la edad.
• Enfermedades cardiovasculares: la erección depende de una buena circulación. A los 50, muchos hombres comienzan a mostrar signos de arteriosclerosis o daño vascular, que dificultan el flujo sanguíneo al pene.
• Diabetes tipo 2: esta enfermedad, que es más común después de los 50, afecta los nervios y vasos sanguíneos responsables de la erección.
• Efectos de medicamentos: es también la etapa donde muchos hombres comienzan tratamientos con fármacos para la presión arterial, colesterol, ansiedad o depresión, todos ellos con potencial efecto secundario en la función eréctil.
• Aspectos psicológicos: cambios en la imagen corporal, estrés laboral, preocupaciones familiares o el inicio de la jubilación también pueden tener un impacto en la vida sexual.
¿Es normal perder fuerza en la erección después de los 50?
No es anormal, pero tampoco debe considerarse “normal” como algo inevitable. La salud sexual sigue siendo posible en esta etapa y más allá. Una erección menos firme, que tarda más en aparecer o que no se mantiene durante todo el acto sexual, puede ser una señal de alerta médica.
Es importante no ignorarla ni resignarse. En muchos casos, se trata de un síntoma tratable y reversible si se detecta a tiempo.
¿Cuándo consultar a un especialista?
Si los cambios en tu función sexual comienzan a afectar tu calidad de vida o tu autoestima, lo recomendable es consultar a un médico especializado en salud sexual. A través de una evaluación integral, que puede incluir análisis hormonales, evaluación vascular y revisión de hábitos de vida, es posible identificar la causa y proponer un tratamiento personalizado.